Avicultura ha tenido apoyo para sortear crisis por pandemia

Avicultura ha tenido apoyo para sortear crisis por pandemia
Los pollos, junto al arroz y habichuela son los tres productos más consumidos en RD.

El sector avícola dominicano no ha quedado fuera de los efectos dejados por la pandemia del Covid-19. Ha tenido sufrimiento, como han tenido otros renglones de la producción nacional.

Sin embargo, el apoyo que ha recibido desde el Estado le ha permitido ir sorteando la situación, conforme ha ido pasando el tiempo desde que el Ejecutivo dispuso medidas de distanciamiento social o físico y confinamiento.

Uno de los anuncios más recientes –que beneficiará a los productores de pollo -se hizo el 10 de mayo, al dar a conocer que el Mercado Dominicano de Abastos Agropecuarios (Mercadom) y la Asociación Dominicana de Avicultura (ADA) acordaron la la construcción de un parque industrial y una planta de frío para productores avícolas en los terrenos del Merca Santo Domingo. Se trata de una obra privada, para la cual Mercadom facilitó los terrenos en arrendamiento. Si bien el gobierno tendrá una participación menor para dar servicio a los productores del Merca (si se mira la cuestión de la inversión), que haya dispuesto de los terrenos es un importante paso de avance. “Los avicultores pagarán por uso del terreno que siempre será propiedad del Estado”, explicó a elCaribe el administrador general del Merca Santo Domingo, Claudio Jiménez. El proyecto anunciado busca poner fin a la falta de refrigeración de excedentes de la industria avícola en situaciones especiales, como superávit de producción o la incidencia de situaciones como la pandemia actual. La construcción incluirá almacenes frigoríficos, atracaderos para contenedores, un centro de procesamiento de huevos, un biodigestor para descomponer el material orgánico en metano y fertilizante e incluirá las oficinas y la cooperativa de la ADA.
Aunque no se tiene la certeza de cuándo podría concluir la construcción, el plan es para rápido, dijo Jiménez.

Semanas después de que declarara que el coronavirus había pasado a ser una pandemia, tres importantes sectores para alimentación dominicana mostraba preocupación por las dificultades que enfrentaban en los canales de distribución.
Pidieron la intervención del Estado para encontrar soluciones. Eso fue a inicios de abril y uno de ellos fue el avícola.

El día 21 (de abril) la Comisión de Alto Nivel de Prevención y Control del Covid-19 anunció un acuerdo con productores agropecuarios, que incluyó la adquisición de pollos y quesos, para ser distribuidos a la población para paliar los efectos del coronavirus Covid-19 en el país. Para entonces se dispuso que serían adquiridas unas 525 mil libras diarias de pollo para distribuirlas a la población, lo que equivale a 5.6 millones de pollos.

Se encargó al Ministerio de Agricultura realizar un programa de asistencia financiera y técnica para el sector agropecuario. Se inició ese apoyo con la compra 5.6 millones de pollos para distribuir 525 mil libras diariamente. El programa de apoyo por parte del Gobierno ha sido más amplio. Ha contemplado que el 25% de los pollos que adquiera debe provenir de pequeños productores para asegurar una salida al mercado de la producción. Con la ejecución del programa se ha ido retirando una mayor cantidad de pollos que alcanzaron el tiempo de salida granjas.

Los pollos pignorados y la capacidad productiva

El Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura también acogió la propuesta de la Asociación Dominicana de Avicultura, de iniciar un Programa de Pignoración de 1.5 millones de pollos.
En el país se producen mensualmente en 17.5 millones de pollo frescos y hay un inventario de seguridad de pollos congelados para enfrentar situaciones no previstas de aumento de la demanda, así como 200 millones de huevo de primera clase. El 7 de mayo el Ministerio de Agricultura y la Dirección General de los Comedores Económicos anunciaron sobre reuniones sostenidas con productores y procesadores de pollos para informarles que el Gobierno comprará un 1.2 millones libras adicionales a las adquiridas antes.

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