La COVID-19 sigue causando estragos en los centros de reclusos del país. Ayer se informó que en la cárcel pública de San Juan hay 32 privados de libertad contagiados.
La Procuraduría General de la República (PGR) indicó que luego de dar positivos, tras una jornada donde realizaron más de 170 pruebas para la detección de la enfermedad, los internos fueron trasladados a centros de aislamientos para ofrecerle atenciones médicas y el tratamiento correspondiente.
La población actual penitenciaría de este recinto, que alberga 756 privados de libertad, será segmentada mientras que los reclusos que den positivo serán tratados gratuitamente en los centros de aislamiento, indicó el procurador general titular de la Corte de Apelación de este distrito judicial, Ciriaco de la Rosa Jiménez.
Destacó que las autoridades continúan aplicando en todos los recintos penitenciarios las medidas preventivas establecidas en los protocolos del Ministerio de Salud Pública, la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Academia Regional Penitenciaria, a fin de contener la enfermedad y proteger a los hombres, mujeres y adolescentes privados de libertad.
La PGR indicó que siguen trabajando junto a las autoridades de salud con la implementación de medidas preventivas para evitar la propagación de la enfermedad y garantizar la salud a la población penitenciaria, destacando en ese sentido que se mantiene la restricción de las visitas al recinto penitenciario, así como la realización de labores de limpieza y el incremento de las medidas de higiene personal de los internos y el personal que labora en el recinto penitenciario.
Añadió, en una nota de prensa, que han tomado las previsiones de lugar para aplicar los protocolos de salud y seguridad establecidos para el debido tratamiento y seguimiento de esos casos en la población penitenciaria.