Favorece acuerdos entre sectores público y privado para solucionar problemas de RD

 

A juicio de Antonio Novas, socio gerente de McKinsey & Company República Dominicana, los acuerdos entre los sectores público y privado serán determinantes para solucionar los principales problemas que afectan al país.

“En (República) Dominicana, cuando todo el mundo se pone a trabajar, las cosas funcionan, y un ejemplo de ello es cómo se gestionó el tema COVID", apuntó.

Dijo que nadie llegó en América Latina a vacunar el 60 % de la población primero que la República Dominicana, y "eso fue una colaboración del sector público y privado, y todos a remar hacia la misma dirección”.

Al participar hoy en el Desayuno Temático de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Novas dijo, además, que lo que se está viendo desde el punto de vista energético, la inversión que se está produciendo en energía solar y eólica, y lo que está planeado para los próximos cuatro años, en términos de porcentaje con el total de energía, "es de los más altos de todo el mundo”.

“El mensaje aquí es que hay que elegir muy bien cuáles son los temas que se quieren trabajar como país a largo plazo y enfocarnos con un acuerdo en el que incluya el mayor abanico posible del sector público y privado para poder hacerlo. Eso sería algo que es necesario y es el momento de poder hacerlo”, indicó.

Por otra parte, Novas señaló que a las energías fósiles les quedan muchos años todavía, por lo que las inversiones serán importantes en este renglón.

“A pesar de que hay grandes inversiones en energías renovables, a todas las energías fósiles todavía les quedan muchísimos años en los que se tienen que invertir, se tienen que hacer más eficientes”, expresó.

“Aunque no quisiéramos utilizar las energías fósiles, –imaginemos que mañana todo pudiera ser renovables, todo está instalado y funcionando–, uno de los productos que mayor importancia tiene como los combustibles fósiles son los abonos no orgánicos. El 40 % de la superficie cultivables en el mundo usa abono derivados del petróleo”, agregó.

Novas apuntó que, si el petróleo desapareciera mañana, el 40 % de la población mundial pasaría hambre. “No solo es energía, sino que es mucho más allá de la energía”.

Agregó que los precios que han subido por la guerra de Ucrania serían una tontería comparado con lo que pasaría con los precios de cualquier cereal, de cualquier cultivo, de cualquier fruta.

“Hagamos lo que hagamos, la inversión en energía seguirá siendo muy relevante”, precisó.

Comercio global

Novas, socio gerente de McKinsey & Company República Dominicana, explicó que, en un mundo interdependiente, el comercio global está en el punto más alto de la historia. Destacó que América Latina sigue siendo un importador de conocimiento.

Otras tendencias señaladas por Novas y que marcan a América Latina son: 

• Creciente urbanización y envejecimiento de la población mundial
• Crecimiento de las energías renovables y reducción de las no renovables
• Necesidad de mayor inversión y uso de tierras para el sistema energético
• Rezago en crecimiento de la productividad frente a otras economías emergentes
• El fantasma de la inflación rondando las economías, así como el crecimiento de la deuda de los gobiernos centrales.

En la actividad, Julio Virgilio Brache, presidente de la AIRD, dijo que el mundo empresarial ha sido sacudido -y lo continúa siendo- por múltiples fenómenos globales y locales.

"Se destacan la pandemia COVID-19 y la guerra entre Ucrania y Rusia. Ambos acontecimientos con un impacto enorme, tanto sobre el crecimiento económico como sobre la forma de producir y de comerciar en múltiples sectores", señaló.

Explicó que República Dominicana -y de modo particular, su industria- han dado muestras de resiliencia, de superación de la crisis.

"Es necesario que podamos hacer altos en el camino, reflexionar y definir cada vez más claramente cómo estas crisis pueden ser clave para consolidar nuestro futuro como industrias que sigan impulsando el desarrollo sostenible de la nación.

Resaltó que uno de los grandes desafíos que tienen las empresas "es la organización de nuestra dinámica interna, de nuestra dirección en tiempos de incertidumbre.

"Puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que las empresas que han permanecido en el tiempo, que han crecido, que son símbolos de bienestar y riqueza, han sabido aprovechar las oportunidades, pero, sobre todo, han sido capaces de tomar las decisiones adecuadas en el momento adecuado", señaló.