Juez sugiere despoblar cárceles

La pandemia ha potencializado viejos problemas de las carceles
Cárcel de La Victoria.

“Debemos pensar, no en castigar con la pena, tenemos que sentarnos a pensar en por qué el hombre está delinquiendo”, es el planteamiento del juez Rafael Báez, como una sugerencia para descongestionar las cárceles dominicanas.
De acuerdo a datos ofrecidos por el magistrado, que realiza sus labores en la Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, el estado actual en las cárceles del país revela que hay una sobrepoblación en el modelo tradicional de más de un 300 por ciento.

Para Báez, el pensamiento penológico debe orientarse en las condiciones sociales que impulsa a que el hombre cometa delitos, y no en la sanción penal, pues considera que eso trae como consecuencia el problema de la sobrepoblación y las dificultades que actualmente se está teniendo para enfrentar la pandemia de la COVID-19 en lugares tan vulnerables como las cárceles.

El juez, magíster en administración penitenciaria, explicó que hay una preocupación muy grande por el crecimiento desmedido de la población penitenciaria en las cárceles, debido al incremento del fenómeno del delito.

Consideró que es necesario que la sociedad se empodere de la temática y colabore para reducir el número de personas privadas de libertad.

“Cada día más entramos en cifras altas de delitos, y no ha habido una respuesta satisfactoria por parte del Estado que no sea la prisión y el encierro… nos hemos encargado, todos, de prisionalizar el sistema y ahora tenemos números desproporcionados, altísimos de personas en condición de privación de libertad que no han visto todavía el juicio de fondo, otros condenados que se le pudiera aplicar algún tipo de beneficio para su reeducación”, sostuvo.

Indicó que es necesario que en toda América Latina y en todo el mundo se disminuya la sobrepoblación de las cárceles ya que no se sabe cuándo va a terminar la pandemia y, por lo tanto, agregó, prepararse para enfrentar la vida futura y aprender a vivir con el virus.

Sostuvo, que como estableció en una entrevista reciente el maestro Raúl Zaffaroni, juez de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, hay una necesidad de despoblación carcelaria, pues esto puede constituir un crimen de lesa humanidad y de abandono masivo.

Durante el webinar “Acceso a la justicia de los condenados en tiempos del COVID-19, organizado por el Poder Judicial, la Escuela Nacional de la Judicatura y la Oficina Nacional de Defensoría Pública, el docente nacional e internacional expuso que un claro ejemplo de la sobrepoblación penitenciaria dominicana es que en la Penitenciaría Nacional de La Victoria hay de ocho mil internos, cuya desproporción de personal de asistencia crea problemas a lo interno.

Descongestionar las cárceles

Como una alternativa para despoblar las cárceles, Báez, que cuenta con un magíster en jurisdicción constitucional, propuso una serie de medidas a aplicarse a nivel nacional, y de esta forma también poder cumplir con lo que pide las Naciones Unidas y la Corte Interamericana De los Derechos Humanos.

Dijo que por jurisdicción, el primer paso sería un censo nacional penitenciario, clasificar y tabular ese censo para determinar cuáles son las personas que están presos por delitos menores, las personas más vulnerables por su edad, las que están por los hechos más graves, y en caso menores clasificarlos para poder buscarles algún tipo de salida procesal pronto, esto es simple posesión de drogas, robo simple, golpes y heridas y una serie de tipos penales, que dijo, no son tan graves.

El magistrado explicó que para esos casos pudiera eventualmente suspendérsele provisionalmente el procedimiento que existe y la posibilidad de que se impulse un juicio abreviado y que en muchos casos se varíe como medida de coerción y se aplique la prisión domiciliaria.

“Tenemos una gran cantidad de presos preventivos actualmente y la mayoría de esas personas tienen mucho tiempo presas por delitos que no son tan graves y que están esperado envío a juicio o audiencia preliminar, esos casos pudieran perfectamente resolverse en la jurisdicción de la instrucción a través de suspensión del procedimiento y juicios abreviados”, manifestó.

Fuente: El Caribe

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