El futbolista inglés Wayne Rooney informó ayer de que ha dado negativo en la prueba de coronavirus, pero dijo estar “enfadado” porque deberá guardar una cuarentena de 14 días al haber estado en contacto con un infectado que no le avisó sobre su estado.
El excapitán de la selección inglesa y del Manchester United se mostró también “decepcionado” porque se perderá “partidos clave” con su actual equipo, el Derby County de la segunda división inglesa, que deberá, por su parte, hacer pruebas a toda la plantilla.
“Acabo de recibir la noticia de que mi test de COVID-19 ha demostrado que no tengo el virus. Estoy contento por mí y mi familia, pero, obviamente, estoy enfadado y decepcionado porque ahora tendré que aislarme”, escribió Wayne Rooney en su cuenta de Twitter.
Antes de conocer el resultado del test, su representante confirmó ayer que el pasado jueves el jugador recibió la visita en su casa, donde vive con su esposa y cuatro hijos, del empresario Josh Bardsley para regalarle un reloj.
La normativa vigente en el Reino Unido para hacer frente a la pandemia obliga a cualquier persona que ha estado en contacto con un positivo a guardar una cuarentena de 14 días.