El Banco de Reservas reafirmó su compromiso de mantener estrictos mecanismos de control y prevención frente a los riesgos que representa el lavado de activos para el sistema financiero dominicano, durante la apertura del Tercer Congreso contra el Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo, realizado este jueves en Santo Domingo.
En su intervención, el presidente ejecutivo de la entidad, Leonardo Aguilera, destacó que el Banreservas se mantiene alineado con los estándares internacionales y las prácticas regionales que buscan blindar la integridad del sistema bancario. Subrayó que, para la institución, liderar acciones que promuevan la ética y refuercen la gobernanza frente a delitos financieros es un compromiso prioritario.
Aguilera recordó que el lavado de activos, derivado de actividades ilícitas, constituye un delito global que desafía la estabilidad de las economías y que ha obligado a más de 200 jurisdicciones, incluida la República Dominicana, a adoptar las recomendaciones del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI). Según estimaciones de la ONU y del propio GAFI, estos flujos ilícitos representan entre el 2 % y el 5 % del PIB mundial, superando los 800 mil millones de dólares al año.
En este 2025, advirtió, la expansión de las criptomonedas ha diversificado los riesgos, impulsando al sector financiero a innovar con herramientas de detección y mayor control, con el fin de evitar que el crimen organizado utilice los bancos como vehículos de legitimación de capitales.
El encuentro también incluyó conferencias magistrales a cargo de figuras clave, entre ellas la procuradora general de la República, Yeni Berenice Reynoso; el especialista en gestión de riesgos, Óscar Moratto; y el director de Compras y Contrataciones Públicas, Carlos Pimentel, quienes abordaron los desafíos estratégicos, el impacto de la inteligencia artificial y la importancia de la cultura de cumplimiento en la gestión pública.
Con la participación de funcionarios, legisladores, empresarios y clientes, el congreso organizado por Banreservas se convirtió en un espacio para reafirmar la necesidad de transparencia, cooperación interinstitucional y adopción de buenas prácticas en la lucha contra los delitos financieros que amenazan la seguridad nacional.