El campo dominicano vuelve a ponerse de pie después del golpe que dejó la tormenta Melissa en varias zonas agrícolas del país. Maquinarias pesadas, brigadas de trabajadores y personal técnico ya se encuentran en el terreno trabajando para recuperar los accesos y apoyar a los productores que vieron afectadas sus cosechas.
Según informaciones del Ministerio de Agricultura, se dispuso el envío inmediato de equipos amarillos retroexcavadoras, bulldozers, palas mecánicas y camiones recolectores a las provincias más golpeadas por el fenómeno. Las labores incluyen poda de árboles, limpieza de caminos y retiro de escombros para reabrir las vías agrícolas en el menor tiempo posible.
El ministro Limber Cruz instruyó además un levantamiento técnico para evaluar los daños en los caminos interparcelarios y coordinar su reacondicionamiento. La meta es evitar que los agricultores pierdan sus productos por falta de acceso a los mercados, una situación que podría impactar el abastecimiento nacional si no se atiende con rapidez.
Melissa, que tras su paso evolucionó a huracán categoría 5, afectó indirectamente áreas de cultivo en San Cristóbal, Peravia, San José de Ocoa, Barahona y Monte Plata. En estas zonas, los equipos trabajan de forma simultánea con las autoridades locales y los comités de emergencia agrícola, buscando estabilizar la producción y mantener la seguridad alimentaria del país.
El operativo de recuperación se enmarca dentro de la política gubernamental de respaldo continuo al sector agropecuario, una de las columnas esenciales de la economía dominicana. Las autoridades aseguran que el compromiso es mantener la productividad y proteger el sustento de las familias que dependen directamente del campo.








