SANTO DOMINGO. Desde el miércoles 16 hasta el domingo 20 de julio, los trenes no circularán entre las estaciones Francisco Peña Gómez y Mamá Tingó, en Villa Mella, ni entre Hermanas Mirabal y Mamá Tingó el fin de semana. La interrupción forma parte de los ajustes finales para que la Línea 1 admita convoyes de seis vagones.
Según un comunicado oficial de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET), durante esos cinco días se moverán y reconfigurarán los equipos de señalización ferroviaria que permitirán la operación mixta de las nuevas formaciones con los trenes actuales.
¿Qué pasará con los pasajeros?
La OPRET, en coordinación con OMSA, desplegará autobuses gratuitos entre Mamá Tingó y Hermanas Mirabal. El INTRANT, la DIGESETT y la Policía Nacional estarán a cargo del ordenamiento vial para evitar cuellos de botella.
Por qué seis vagones marcan la diferencia
En 2023 el Metro superó los 100 millones de usuarios unos 285 000 abordajes diarios en promedio, presión que se nota con mayor intensidad en hora pico. Para aliviar esa marea de gente, OPRET compró material rodante adicional y adaptó andenes y sistemas. La entidad ya había adelantado en febrero que los trenes extendidos entrarían en servicio «a partir de julio de 2025», primero en la Línea 1 y luego en la 2.
Impacto inmediato y a mediano plazo
Durante la pausa técnica los usuarios deberán sumar entre 10 y 15 minutos a sus traslados, estiman fuentes del Gabinete de Transporte. Sin embargo, la ganancia futura es sustancial: cada tren de seis vagones aumentará la capacidad por viaje en más de un 30 %, lo que se traducirá en menos filas y menor tiempo de espera en andén.
Al mejorar el flujo norte-sur de la ciudad, la medida también debería aliviar la saturación de la avenida Hermanas Mirabal y del corredor de la Charles de Gaulle, donde se concentran las guaguas hacia barrios periféricos. Expertos en movilidad urbana como el ingeniero José Luis Gerbasi recuerdan que «un minuto menos en la espera del Metro equivale a miles de horas-pasajero ganadas al año», un efecto que impacta directamente la productividad y la salud de los capitalinos.
Lo que sigue
OPRET mantendrá abiertas las taquillas de las estaciones cerradas para venta y recarga de tarjetas, con la recomendación explícita de hacerlo antes del 16 de julio. Si el cronograma se cumple, los primeros trenes de seis vagones empezarán a circular a principios de agosto, conviviendo con los actuales hasta que la flota alargada cubra toda la frecuencia.
Con esta jugada técnica y logística, la entidad apuesta a que el Metro recupere su holgura original y siga siendo como presume su director, Rafael Santos Pérez la columna vertebral de la movilidad en Santo Domingo.
