SANTO DOMINGO. En una ceremonia cargada de aplausos y bata blanca, el presidente Luis Abinader encabezó la quinta entrega de los Premios al Desempeño del Servicio Nacional de Salud (SNS), acto que también sirvió para festejar el décimo aniversario de la institución. La gala, celebrada en la capital, reunió a directores hospitalarios de todo el país y funcionarios del sector, con el propósito de reconocer las mejores prácticas dentro de la red pública.
Durante el evento, el mandatario subrayó que la inversión pública “se ha optimizado a pesar de los vientos económicos en contra”, frase que encontró eco en el director del SNS, Mario Lama. El funcionario enumeró resultado 75 hospitales remozados, récord en los cinco principales indicadores de servicio y una reducción del 69 % en traslados de pacientes desde la región Sur. Entre los centros laureados figuraron el Hospital Regional Señora del Carmen de Azua (oro), el Ney Arias Lora, el Regional Luis Bogaert de Valverde, el Provincial General Santiago Rodríguez y el Municipal Nuestra Señora del Carmen de Azua.
Las cifras más comentadas de la noche, sin embargo, provinieron de la sala de neonatología: el país registra 13.08 muertes neonatales y 15.92 infantiles por cada mil nacidos vivos, la tasa más baja en 15 años, según datos del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (SINAVE). Este hito se apoya en programas como Mamá Canguro y en la apertura de nuevas UCIN, estrategias que han empujado una caída del 30 % en la mortalidad neonatal frente a 2023.
Para sostener estos logros, el proyecto de Presupuesto General del Estado 2025 contempla que salud absorba cerca del 18 % del gasto público, cifra que el Gobierno defiende como la mayor de la última década para el sector. Analistas consultados señalan que, además de infraestructura, urge fortalecer la atención primaria y la digitalización de expedientes para evitar que los avances se queden en estadísticas de premiación.
En el cierre, el SNS reconoció a la primera dama, Raquel Arbaje, por su apoyo a proyectos comunitarios y de salud materna. La combinación de premios, cifras y promesas deja un mensaje claro: el sistema público de salud dominicano celebra, pero también se somete al escrutinio de resultados que, por ahora, ofrecen razones para el optimismo.








