El ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, aseguró durante una visita oficial a la India que ambos países comparten “una batalla común contra el terrorismo islámico radical”. Sus declaraciones llegan en medio de la tensión diplomática entre Tel Aviv y Madrid, y tras recientes ataques yihadistas en la disputada región de Cachemira.
Según informó EFE, Smotrich destacó que Israel y la India enfrentan “una misma guerra del bien contra el mal” y acusó a la comunidad internacional de hipocresía al criticar la respuesta de ambas naciones frente a las amenazas extremistas. En su discurso en Bombay, subrayó que los dos países cuentan con “amigos y enemigos comunes” y que su alianza busca reforzar la seguridad en un contexto global marcado por la violencia religiosa.
Las palabras del ministro israelí buscan conectar con el prolongado conflicto en Cachemira, donde el Gobierno indio combate desde hace décadas a grupos armados islamistas. Nueva Delhi ha denunciado en múltiples ocasiones que estas facciones reciben apoyo y financiación desde Pakistán, lo que ha derivado en choques militares y operaciones de represalia, como el bombardeo a un presunto campamento insurgente en mayo pasado.
La India reconoce oficialmente a Palestina desde 1988 y ha defendido en foros internacionales la necesidad de resolver la guerra en Gaza por vías diplomáticas. Sin embargo, bajo el liderazgo de Narendra Modi, el país asiático ha cultivado una relación cercana con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en torno a la cooperación en seguridad y defensa. Modi ha expresado reiteradamente su respaldo a Israel en la lucha contra “el terrorismo en todas sus formas”.
El acercamiento entre Nueva Delhi y Tel Aviv, fortalecido en la última década, refleja la convergencia de intereses frente a los desafíos del extremismo violento. A pesar de las diferencias diplomáticas en torno a Palestina, ambos gobiernos buscan presentarse como aliados estratégicos en un escenario geopolítico cada vez más polarizado.