El Atlético de Madrid volvió a mostrar su jerarquía europea en el Metropolitano con una victoria convincente 3-1 sobre el Union Saint Gilloise, en un encuentro donde los rojiblancos combinaron eficacia, paciencia y un cierre implacable que hizo vibrar a su afición.
Según informó la agencia EFE, el conjunto dirigido por Diego Simeone dominó buena parte del partido y encontró en Julián Álvarez al encargado de abrir el camino. El argentino marcó en el minuto 39 tras una brillante jugada por la derecha de Giuliano, quien desbordó a su marcador antes de servirle el balón con precisión.
En la segunda mitad, el Atlético mantuvo la presión alta y fue Conor Gallagher quien amplió la ventaja con un derechazo certero en el minuto 72, tras una rápida combinación que inició Sorloth con una potente carrera en velocidad. El Union Saint Gilloise, sin embargo, no bajó los brazos y logró descontar en el 79 por medio de Sikes, generando cierta inquietud entre los locales.
Pero el Atlético, fiel a su estilo, respondió con contundencia. En el tiempo añadido, Marcos Llorente selló el triunfo con el 3-1 definitivo tras aprovechar un rebote en el área. El gol desató la euforia en las gradas y confirmó el buen momento del equipo madrileño, que suma tres puntos clave para su clasificación en la fase de grupos.
Más allá del resultado, el encuentro dejó buenas sensaciones en el rendimiento colectivo. Álvarez volvió a ser determinante, Gallagher demostró adaptación total al esquema de Simeone y la defensa mantuvo firmeza durante la mayor parte del encuentro. El Atlético, con este resultado, se mantiene como uno de los equipos más sólidos del torneo continental.
