El Gobierno brasileño mantendrá aislados a los indígenas no contactados en la Amazonía y restringirá los servicios de salud o seguridad que eventualmente les ofrece, en una estrategia para mantenerlos alejados del coronavirus, que puede provocar su extinción, informaron este lunes fuentes oficiales.
El Ministerio Público informó este lunes que la Fundación Nacional del Indio (Funai) decidió acatar sus sugestiones en ese sentido para garantizar la vida de los indígenas no contactados.
Las acciones que venía adelantando el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro a través de la Funai para evitar la propagación del coronavirus entre los indígenas tendrán que contar con la aprobación del organismo a cargo de los pueblos no contactados y solo podrán efectuarse de manera “excepcional” por personal técnico especializado, según lo acordado con la Procuraduría.
Los nuevos controles responden a una solicitud del Ministerio Público que advirtió que intentar entablar contacto con estos pueblos por parte de instancias “sin capacidad legal y técnica” puede “agravar la exposición a la COVID-19 de comunidades que tienen poca o ninguna capacidad de respuesta inmunológica al virus”.
En este sentido, la Procuraduría pidió a la Funai elaborar un plan de contingencia para brotes y epidemias, así como activar una sala de situación para apoyar la toma de decisiones en relación a los pueblos indígenas aislados o recientemente contactados.
La recomendación del Ministerio Público se dio tras la controversia que generó la Funai al determinar que se mantuvieran los “servicios esenciales” ofrecidos a los grupos aislados, en manos de personas no calificadas para la atención y manejo de estas comunidades, una gestión que, según la Procuraduría, debe estar a cargo de la Coordinación de Indios Aislados y de Reciente Contacto.
Los pueblos indígenas aislados son poblaciones que para sobrevivir al contacto promovido por el hombre se refugian en la selva y viven sin contacto alguno con la sociedad.
Las enfermedades, la violencia física, el saqueo de los recursos naturales y otras agresiones han diezmado poblaciones enteras en el pasado.
Un estudio de la organización no gubernamental Instituto Socio Ambiental (ISA) señala que en la actualidad existen 115 pueblos indígenas aislados en Brasil, 28 de los cuales han sido confirmados.
Según la Secretaría Especial de Salud Indígena, entidad adscrita al Ministerio de Salud, no hay confirmación de que en alguno de los 34 Distritos Especiales de Salud Indígena (Dseis) del país haya presencia del coronavirus.
De acuerdo con el último reporte del Ministerio de Salud, Brasil tiene 1.891 casos confirmados y 35 muertes por la COVID-19.