Con 2/3 de votos a favor, los diputados aprobaron en segunda lectura el proyecto que reduce de un año a seis meses la pasantía que deben cumplir los egresados de medicina para obtener su exequátur. La pieza deroga las leyes 146-67 y 478-73 y pasa ahora al Senado. Si se promulga, el Servicio Nacional de Salud será la única entidad que asigne esas pasantías, priorizando los Centros de Primer Nivel y otorgando más puntos a quienes acepten provincias fronterizas como Pedernales o Dajabón.
Los proponentes alegan que el cuello de botella actual deja a cientos de graduados inactivos y sin ingreso, mientras zonas rurales siguen sin galenos. Queda la duda de si seis meses bastan para madurar la práctica clínica o si creará médicos “a medio cocer”. El Senado tendrá la última palabra y los gremios ya piden amplia consulta para no sacrificar calidad por rapidez.








