Diddy será sentenciado en Nueva York tras absolución de los cargos más graves

-

El rapero estadounidense Sean Combs, conocido mundialmente como Diddy, enfrentará mañana su sentencia en Nueva York en un proceso judicial que ha mantenido en vilo a la industria musical y a sus seguidores. Aunque se libró de la cadena perpetua al ser absuelto de los cargos más graves, el artista de 55 años encara la posibilidad de pasar hasta dos décadas en prisión.

Según la agencia EFE, un jurado lo exoneró el pasado julio de los delitos de crimen organizado y tráfico sexual, pero lo declaró culpable de dos cargos relacionados con el transporte de personas para ejercer la prostitución. Esos cargos son ahora el eje central del proceso, luego de que el juez federal Arun Subramanian rechazara esta semana la petición de la defensa de anularlos o de celebrar un nuevo juicio.

La fiscalía ha solicitado una condena mínima de once años, argumentando que las conductas atribuidas a Diddy reflejan un patrón de abuso prolongado y una falta de arrepentimiento. En contraste, su equipo legal insiste en que la pena no debe superar los 14 meses, tomando en cuenta que ya lleva más de un año recluido en un centro penal de Brooklyn desde su arresto en septiembre de 2024.

Durante el juicio, el testimonio más sonado fue el de la cantante Cassie Ventura, expareja del rapero, quien relató episodios de violencia física, abuso sexual y las llamadas “freak offs”, encuentros sexuales prolongados con terceros bajo el consumo de drogas. Otras mujeres, identificadas con seudónimos o antiguos vínculos laborales con el artista, se sumaron a las acusaciones y han pedido al juez que imponga una condena ejemplar.

Al mismo tiempo, familiares y allegados del artista, incluidos su madre, varios de sus hijos y la rapera Yung Miami, enviaron cartas describiéndolo como un hombre solidario y generoso, y solicitando clemencia en la sentencia. En un giro inesperado, una de las supuestas víctimas, Virginia Huynh, incluso pidió previamente su libertad bajo fianza, alegando que Combs reconoció errores y prometió cambios en su vida.

La sentencia de mañana marcará un punto de inflexión no solo para la carrera de Diddy, sino también para el debate público en torno al poder, los abusos y las dinámicas de silencio en la industria musical. El juez Subramanian tendrá que ponderar entre el clamor de las víctimas, la defensa férrea del entorno del rapero y la magnitud de los delitos que se le atribuyen.

Lo Más Reciente

MÁS NOTICIAS