Karl-Anthony Towns se puso el traje de verdugo con 31 puntos y Jalen Brunson confirmó por qué le dieron el premio al Jugador Clutch del Año al sumar 30, para que los Knicks sobrevivieran 118-116 frente a unos combativos Pistons en el Little Caesars Arena la noche del jueves.
Tal como reseñó De Último Minuto, Detroit remó hasta el final y estuvo a un triple de forzar la prórroga, pero Nueva York controló los nervios en los segundos decisivos. Brunson metió dos bandejas seguidas que abrieron colchón de siete; luego encestó y falló intencionalmente desde la línea para que el reloj corriera, y un pase errático de Jalen Duren cerró la persiana.
La estadística vuelve a castigar a los locales los Pistons encadenan ocho derrotas de postemporada en casa desde 2008 y se colocan a una de igualar el récord negativo de Filadelfia (1968-71) . El revés duele más porque apenas 48 horas antes habían roto la racha de 15 caídas seguidas en playoffs y recuperado la ventaja de campo.
El dominicano Towns adquirido en octubre en un canje de alto perfil que transformó la plantilla neoyorquina dominó la pintura todo el encuentro; OG Anunoby sumó 22 tantos y Mikal Bridges aportó defensa perimetral clave. Detroit respondió con 27 puntos del veterano Tim Hardaway Jr. y 24 de Cade Cunningham, pero no fue suficiente para revertir los errores en la salida del balón.
Detrás de la pizarra hay otra historia los Pistons, que pasaron de un 14-68 en 2023-24 a un sorprendente 44-38 esta campaña, siguen aprendiendo a cerrar partidos grandes . Su salto competitivo es real, mas la inexperiencia pesa cuando cada posesión vale oro.
El cuarto juego será este domingo, de nuevo en Detroit. Si los Knicks repiten la fórmula balón a Towns temprano y a Brunson cuando quema el reloj podrían sellar la serie y darse el lujo de descansar. A los Pistons solo les sirve ganar para no aparecer en los libros como la franquicia con la peor seguidilla de derrotas caseras en la historia de los playoffs.