Mujeres con gigantomastia celebran acceso a cirugías cubiertas por seguro

-

A lo largo de los años, decenas de mujeres han cargado con el peso físico y emocional de enfermedades poco comunes como la ginecomastia y la gigantomastia. Tras años de espera y limitaciones, muchas de ellas hoy encuentran una nueva oportunidad para sanar y recuperar su bienestar.

Según un reportaje publicado por María Saldaña en CDN, tres dominicanas compartieron sus testimonios sobre el dolor, la discriminación y la esperanza que las han acompañado en su proceso. Saquia De Jesús, de 27 años, fue diagnosticada con ginecomastia a los 14 y asegura que la posibilidad de ser operada, con el apoyo del seguro médico, representa un renacer. Su historia es un canto a la resiliencia y a la fe.

El recorrido de Saquia se cruza con el de Maciel Hernández, una madre de Manoguayabo que ha hecho de su lucha una lección de fortaleza. Las cicatrices que muestra en los hombros son más que marcas quirúrgicas: son huellas de un pasado de burlas y dolor, pero también de resistencia. Ella misma afirma que cada día es una victoria frente al estigma y el cansancio que la acompañaron durante años.

Desde la provincia Independencia, Alba Caraballo suma su voz a este coro de valentía. Con más de dos décadas viviendo con gigantomastia y una hija adolescente que padece la misma condición, ha aprendido a enfrentar los desafíos con determinación. La reciente decisión del Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) de incluir este tipo de cirugías dentro del Régimen Familiar de Salud ha sido, para Alba y muchas otras mujeres, una verdadera puerta hacia la dignidad y el alivio.

El impacto de esta medida va más allá del ámbito médico significa reconocimiento y justicia para quienes por mucho tiempo fueron invisibles en el sistema. Fundaciones como Funva han jugado un papel esencial al acompañar a mujeres de escasos recursos en su búsqueda de soluciones, recordando que la salud no debe ser un privilegio, sino un derecho.

En medio de historias marcadas por el dolor y la espera, Saquia, Maciel y Alba representan un mensaje de esperanza colectiva. Son el reflejo de una lucha que trasciende lo físico y toca lo más profundo del alma: el deseo de vivir sin miedo, sin vergüenza y con la certeza de que cada paso hacia la salud es también un paso hacia la libertad.

Penelope Herrera
Penelope Herrera
Periodista digital con más de 4 años de experiencia en medios de comunicación. Secretaria Ejecutiva en empresa de desarrollo web y publicidad digital.

Lo Más Reciente

MÁS NOTICIAS