Los rendimientos de los bonos gubernamentales a largo plazo han escalado en Estados Unidos y Europa, alcanzando niveles no vistos en más de tres décadas. Este incremento implica que los gobiernos deberán pagar más intereses para acceder a financiamiento, lo que presiona aún más los presupuestos nacionales ya afectados por altos déficits.
De acuerdo con un reporte de The Times, el rendimiento de los bonos británicos a 30 años llegó a 5,6 %, mientras que Francia y Alemania experimentan alzas similares. En Estados Unidos, la Reserva Federal ha endurecido su política monetaria, lo que contribuye a un encarecimiento del crédito en general.
Este fenómeno impacta directamente a países emergentes como República Dominicana, que suelen emitir bonos soberanos en los mercados internacionales para financiar obras de infraestructura o programas sociales. A mayor tasa de interés global, mayor será el costo de endeudarse, lo que podría presionar las finanzas públicas.
En el caso dominicano, el Ministerio de Hacienda ha colocado bonos en dólares y euros en años recientes. Si el contexto internacional se mantiene restrictivo, será más difícil acceder a financiamiento barato y se incrementará el peso del servicio de la deuda, que ya representa uno de los principales gastos del Presupuesto Nacional.
Analistas advierten que esto obligará a República Dominicana a reforzar su disciplina fiscal y a buscar alternativas de financiamiento interno, como el fomento al ahorro nacional y la diversificación de fuentes de ingreso a través de mayor competitividad exportadora.








