El flujo de embarcaciones marítimas que arribará a los puertos dominicanos en abril promete dinamizar el sector turístico. Se estima que unas 74 naves anclarán en varios puntos estratégicos del país, un acontecimiento que muchos consideran un paso firme en la consolidación de la República Dominicana como uno de los destinos más completos del Caribe.
Durante los últimos meses, esta actividad ha impulsado un mayor movimiento económico en zonas como Puerto Plata, La Romana, Samaná y Cap Cana. De acuerdo con datos oficiales, el director ejecutivo de la Autoridad Portuaria Dominicana (Apordom), Jean Luis Rodríguez, resaltó que el fortalecimiento de la infraestructura portuaria y la confianza depositada por las principales líneas navieras alimentan este crecimiento vertiginoso. Además, destacó que miles de trabajadores informales, desde guías turísticos hasta artesanos, se benefician de la llegada masiva de cruceristas.
Expertos en turismo sostienen que la República Dominicana no solo se centra en la cantidad de barcos que arriban, sino también en la experiencia de los visitantes. Esa visión se refleja en el avance de destinos como Puerto Plata, con 62 cruceros agendados, y en la creciente relevancia de La Romana, Samaná y Cap Cana, que recibirán otras 12 embarcaciones. Conforme a los análisis proporcionados por el Banco Central de la República Dominicana, la actividad turística marítima influye directamente en el incremento del gasto promedio por visitante, generando más oportunidades comerciales para restaurantes, tiendas de recuerdos y tours locales.
En línea con la Organización Mundial del Turismo, el país goza de una posición privilegiada en la región, no solo por sus hermosas playas y paisajes, sino también por su gente hospitalaria y la variedad de experiencias culturales. Todo parece indicar que, manteniendo el ritmo y la coordinación entre el sector público y privado, la nación caribeña seguirá brillando en el mapa de cruceros mundiales, mostrando al mundo que hay mucho más que sol y arena en esta tierra.