El Consejo Federal de Suiza aprobó una contribución de 64 millones de francos suizos (68 millones de euros) al Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria, correspondiente al periodo 2026-2028.
Según informó la agencia EFE, la medida busca no solo salvar miles de vidas mediante el fortalecimiento de programas de prevención y tratamiento, sino también reafirmar a Ginebra como un centro neurálgico del multilateralismo, en un contexto de recortes financieros por parte de grandes donantes como Estados Unidos.
Desde su creación en 2002, el Fondo Mundial ha contribuido a salvar 65 millones de vidas gracias a proyectos desarrollados en distintas regiones del mundo. El Gobierno helvético subrayó que este nuevo compromiso permitirá continuar avanzando en la lucha contra estas enfermedades, al tiempo que se diseñan estrategias más innovadoras y sostenibles.
En su comunicado oficial, el Ejecutivo remarcó que la decisión llega en un momento marcado por conflictos y tensiones internacionales que amenazan la cooperación entre Estados. “Suiza envía una señal clara: la solidaridad internacional no solo es posible, sino también eficaz”, destacó el Consejo Federal.
El aporte helvético refuerza la posición del país como un actor clave en el ámbito de la diplomacia multilateral y confirma el rol de Ginebra como sede de numerosas organizaciones y ONG, cuya labor se ve afectada por los actuales ajustes presupuestarios en el escenario global.