El actor Tylor Chase, recordado por su papel de Martin Qwerly en la serie juvenil Manual de supervivencia de Ned, de Nickelodeon, fue visto recientemente deambulando por las calles de Riverside, California, en aparente situación de calle.
Según publicó Listín Diario, el caso llamó la atención luego de que una creadora de contenido compartiera en TikTok un video donde se observa a Chase frente a la ventanilla de un automóvil, con barba, ropa desgastada y signos visibles de deterioro físico. En el clip, el actor se identifica y asegura estar involucrado en un “movimiento cristiano de actuación”, lo que generó preocupación entre sus seguidores.
La reacción en redes fue inmediata. Algunos usuarios organizaron una colecta en GoFundMe para ayudarlo, pero presuntamente su madre intervino solicitando que no le enviaran dinero ni dispositivos móviles, ya que según explicó él no puede administrarlos ni seguir un tratamiento médico de forma adecuada.
Tylor Chase, nacido en Arizona en 1989, tiene 36 años y su aspecto actual ha sorprendido a muchos por el contraste con la imagen juvenil que dejó en sus participaciones en televisión. Además de su rol en Nickelodeon, trabajó en la película Good Time Max (2007) y en la popular comedia Everybody Hates Chris, emitida durante siete temporadas a partir de 2005.
La última vez que se supo de su actividad artística fue en 2021, cuando subió videos a su canal de YouTube, donde desde 2014 compartía actuaciones y poemas. Desde entonces, su figura había permanecido alejada de la esfera pública.
El caso de Chase no es aislado. Varias exfiguras infantiles de la televisión estadounidense han atravesado situaciones complejas tras el final de sus carreras, lo que ha abierto debates sobre la salud mental, el abandono institucional y la falta de apoyo que enfrentan muchos artistas una vez que desaparecen de la pantalla. La historia de este actor vuelve a poner en evidencia la fragilidad de quienes alcanzan la fama a muy temprana edad.
