Acuerdo EE. UU.–Ucrania para explotar tierras raras y financiar la reconstrucción
Tras meses de tironeo, el secretario del Tesoro Scott Bessent y la vice primera ministra Yulia Svyrydenko firmaron en la Casa Blanca el “United States-Ukraine Reconstruction Investment Fund”. La Casa Blanca obtendrá acceso preferencial a contratos de tierras raras litio, titanio y lantánidos a cambio de inyectar capital en carreteras, energía y defensa aérea.
Claves del pacto
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Sin deuda nueva: Kiev no compromete reembolsos por la ayuda militar previa; punto nodal para el Parlamento ucraniano.
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Control soberano: Ucrania retiene la decisión de “qué y dónde extraer”, mensaje para escépticos de una nueva “colonización” de recursos.
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Geopolítica cruda: Trump asocia cualquier dólar a un “quid pro quo” minero; la UE observa con recelo una jugada que puede desplazar su influencia en la reconstrucción.
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China en el retrovisor: EE. UU. busca romper el monopolio chino de tierras raras; Ucrania se convierte en ficha estratégica si la guerra se congela.
Mirada dominicana: Esto redefine la cadena global de baterías y electrónica. A mediano plazo, encarece la materia prima para países sin reservas (como RD) y puede presionar costos de manufactura local de electrodomésticos y vehículos.