El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, defendió este lunes los recientes ataques ucranianos contra infraestructuras energéticas en territorio ruso, afirmando que son una respuesta directa a los bombardeos masivos de Rusia sobre el sistema energético ucraniano. Según explicó, los rusos deben entender “el precio” de la guerra que su país desató hace más de dos años.
De acuerdo con informaciones difundidas por la agencia EFE, Zelenski ofreció sus declaraciones durante una conferencia de prensa en Kiev junto al primer ministro de Países Bajos, Dirk Schoof. El mandatario ucraniano insistió en que su Ejército no busca dañar a la población civil rusa, pero sí transmitir el costo real de los ataques continuos a ciudades y plantas energéticas de Ucrania.
El presidente subrayó que las ofensivas ucranianas han estado dirigidas principalmente contra refinerías y otros objetivos estratégicos en Rusia, con el propósito de afectar la base económica que sostiene la maquinaria militar del Kremlin. “Debemos socavar su capacidad de financiar la guerra; y sus exportaciones energéticas son la fuente principal de esos recursos”, afirmó.
El fin de semana, un ataque ucraniano dejó sin electricidad a unas 40.000 personas en la región rusa de Bélgorod, cercana a la frontera con Ucrania. El suceso ocurrió pocos días después de que Moscú lanzara una nueva ola de bombardeos masivos contra infraestructuras eléctricas y gasísticas ucranianas, una estrategia que ha dejado amplias zonas del país bajo cortes de energía intermitentes desde el inicio del conflicto.
Zelenski reiteró que Ucrania responde dentro del marco de defensa legítima, frente a un enemigo que ha atacado indiscriminadamente objetivos civiles durante toda la guerra. En su mensaje, el mandatario buscó no solo justificar la estrategia militar, sino también enviar un mensaje político: que el pueblo ruso sienta, aunque sea de forma limitada, las consecuencias de la agresión que su propio gobierno ha desatado.
