El tipo de cambio en la República Dominicana cerró octubre con una ligera presión al alza sobre el peso, marcando una jornada estable pero con señales de depreciación acumulada a lo largo del año. La cotización del dólar estadounidense para este viernes 31 de octubre de 2025 se mantiene en RD$63.82 para la compra y RD$64.49 para la venta, según los valores de referencia más recientes.
De acuerdo con los datos publicados por el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), las variaciones interanuales confirman una pérdida sostenida de valor del peso frente al dólar. Hace un año, la tasa de compra se ubicaba en RD$59.02 y la de venta en RD$60.21, lo que refleja un descenso de más del 6 % en la capacidad de compra de la moneda local respecto a la divisa estadounidense.
Aunque la estabilidad diaria puede dar la impresión de un mercado cambiario controlado, los indicadores de mediano plazo narran otra historia: la depreciación se consolida como una tendencia estructural más que coyuntural. En comparación con el cierre de 2024, el peso ha perdido más de un punto porcentual de su valor real cada trimestre.
El Banco Central, a través de su Encuesta de Expectativas Macroeconómicas, proyecta que el tipo de cambio cierre 2025 en torno a RD$64.00 por dólar. Esta proyección coincide con los escenarios anticipados por analistas financieros del sector privado, quienes anticipan un ajuste leve pero sostenido en el valor de la moneda nacional, asociado a factores como la moderación del turismo, el alza en las importaciones y las presiones fiscales del último trimestre.
La depreciación del peso también responde al comportamiento internacional del dólar, que ha ganado terreno frente a la mayoría de las monedas de la región en los últimos meses, impulsado por la política monetaria restrictiva de la Reserva Federal de Estados Unidos y las tensiones en los mercados emergentes.
En lo que resta del año, se espera que la autoridad monetaria mantenga su estrategia de intervención gradual, preservando el equilibrio cambiario sin sacrificar las reservas internacionales. Para los analistas, el verdadero reto será sostener esa estabilidad sin frenar la recuperación económica interna.








