Los Filis de Filadelfia se lucieron anoche en el Nationals Park y desataron un auténtico carnaval de batazos, imponiéndose con un sólido marcador de 11-6 ante los Nacionales de Washington. Su ofensiva se notó encendida desde temprano y terminó por someter a los lanzadores locales con un desfile de cuadrangulares, impulsando carreras clave en momentos oportunos. La afición visitante, contagiada por la emoción, no dejó de animar a un equipo que parece afianzarse en la tabla de posiciones de la Liga Nacional, según datos recientes de la MLB.
Según deultimominuto, el jardinero Kyle Schwarber despachó un batazo de tres carreras en la sexta entrada y empalmó su segundo cuadrangular en encuentros consecutivos, catapultando a la novena de Filadelfia hacia un rally de cinco anotaciones. Brandon Marsh, por su parte, aportó otro cañonazo de tres carreras en la séptima, provocando un estruendo en las gradas que resonó como si estuviesen jugando en la ciudad del amor fraternal. El aporte de Bryson Stott no se quedó atrás: con un jonrón de dos anotaciones en la cuarta entrada, niveló el marcador frente al abridor de los Nacionales, Jake Irvin.
El recién incorporado Jesús Luzardo, pitcher de origen peruano, se adjudicó su primera victoria (1-0) al recetar once ponches en cinco sólidas entradas, maniatando casi por completo a la ofensiva de Washington. Solo un cuadrangular del venezolano Keibert Ruiz pudo romper la calma en el segundo capítulo. Luzardo ha mostrado un repertorio llamativo, y algunos reportes estadísticos lo posicionan como uno de los lanzadores latinoamericanos a seguir esta temporada.
De la parte dominicana, Johan Rojas tuvo una aportación notable al remolcar una carrera en su único turno. La ofensiva de Filadelfia también se vio fortalecida por el panameño Edmundo Sosa, quien sumó par de hits, colaborando con anotaciones que terminaron por inclinar la balanza de manera contundente. Mientras tanto, en la escuadra de Washington, el dominicano Amed Rosario destacó con tres imparables y mostró un corrido de bases agresivo que lo llevó a pisar el plato en tres ocasiones. A pesar del ánimo que buscaban inyectar los bates locales, el pitcheo no logró contener la ráfaga ofensiva de los visitantes.
En otros espacios informativos se comenta que los Filis podrían continuar esta racha arrolladora en la próxima serie, tomando en cuenta la confianza que exhiben tanto sus lanzadores de relevo como sus toleteros de poder. Ese impulso cobra especial relevancia ahora que la temporada comienza a definirse y cada juego se convierte en un peldaño crucial hacia la postemporada. Aun así, la liga sigue abierta, y cualquier mínimo descuido podría cambiarle el rumbo a cualquier equipo.