El histórico liceo Eulogio Rosario lleva años con grietas que se multiplican como verdolaga en lluvia, y hoy más del 80 % de su estructura muestra filtraciones, columnas corroídas y losas a punto de ceder. Estudiantes, maestros y padres sienten que cada timbre podría ser el último antes de una tragedia.
Según Listín Diario, el periodista Edgar Lantigua documentó la denuncia pública que hicieron el vocal distrital Juan Crisóstomo “Cuchumba” y el pastor Estanislao Villamán, quienes suplican una intervención urgente del Ministerio de Educación (Minerd) para evitar que el plantel colapse sobre sus 430 alumnos.
Un problema que rebasa la pintura y el yeso
El Minerd promociona desde 2021 un programa de mantenimiento correctivo al que ha transferido RD$ 11,800 millones para reparaciones menores en los centros educativos, incluyendo techos y sistemas eléctricos.Sin embargo, las goteras del Eulogio Rosario se convirtieron en cascadas que debilitaron vigas y columnas; hoy los hierros están al aire en los baños y las aulas huelen a humedad rancia. Arquitectos consultados advierten que, cuando el concreto se desprende y deja expuesta la varilla, la estructura pierde resistencia y el riesgo sísmico se dispara.
Aunque el director de Mantenimiento e Infraestructura Escolar, Fernando Taveras, prometió entregar “cien planteles rehabilitados antes de que termine el año escolar 2024-2025”, el liceo de Cambiaso nunca entró en ese listado.La comunidad sospecha que los fondos no bajan con la prontitud que anuncian los boletines oficiales.
Entre el 4 % del PIB y la realidad del aula
República Dominicana destina un 4 % del PIB a educación desde 2013, una cifra aplaudida en foros internacionales. Pero de los RD$ 11,391 millones presupuestados para infraestructura escolar en 2025, apenas el 37 % está etiquetado para reforzar o reconstruir planteles existentes; el resto se va en obras nuevas que suelen retrasarse o quedar a medias. Ingenieros señalan que el gasto preventivo impermeabilización temprana, mantenimiento de columnas y revisión de juntas cuesta hasta ocho veces menos que una reconstrucción total.
Para Puerto Plata, una provincia con alta salinidad y exposición ciclónica, la corrosión avanza más rápido. El Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA) recomienda inspecciones anuales y reforzamiento con morteros anticorrosivos, prácticas que no llegan a la mayoría de los liceos costeros.
Voces de la comunidad
“Si ese techo se cae, no habrá presupuesto que devuelva la vida de un muchacho”, advierte Crisóstomo, mientras señala una línea de agua que corre del plafón al pizarrón.
Marisol Gómez, profesora de Ciencias, cuenta que cada aguacero obliga a mover pupitres y suspender experimentos “Los chicos aprenden más sobre cómo colocar cubetas que sobre química”, dice entre risas que ocultan la preocupación.
Padres y líderes religiosos anunciaron una jornada de movilización para la próxima semana: visitarán la regional 11-02 del Minerd con fotografías, videos y un informe técnico elaborado por voluntarios. De no obtener respuesta, barajan convocar a una cadena humana frente al plantel el primer lunes de mayo, coincidiendo con el reinicio de clases tras el asueto del Día del Trabajo.
¿Qué puede hacer el Minerd ahora mismo?
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Evaluación estructural inmediata. Un equipo de ingenieros estructuralistas debe determinar la capacidad portante actual del edificio y si es necesario desalojarlo de forma temporal.
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Asignación de fondos de la partida de contingencia. El reglamento interno del Minerd permite liberar recursos de emergencia sin esperar el presupuesto modificado del Congreso.
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Plan de reforzamiento por fases. Empezar por apuntalar columnas y losas críticas; luego impermeabilizar techos para cortar la humedad.
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Supervisión ciudadana. Incluir representantes de la Junta Distrital y del comité de padres en cada acta de recepción de obra, para garantizar transparencia y calidad.
Más allá de Cambiaso
Expertos calculan que al menos 400 planteles del sistema público muestran daños estructurales de moderados a severos, la mayoría construidos antes de 1990 y nunca reforzados con normas sismorresistentes. El caso del Eulogio Rosario es un espejo que podría reflejarse en otros municipios si el Minerd no acelera su respuesta.
Con la temporada ciclónica a la vuelta de la esquina y la falla sísmica Septentrional activa, cada día de espera aumenta la posibilidad de un desenlace trágico. La pelota está en la cancha del Ministerio o invierte ahora, o pagará después un costo mucho más alto en presupuesto y en vidas.