La tranquilidad del Archipiélago de Las Perlas, en el Pacífico panameño, se vio interrumpida este Viernes Santo cuando la lancha de pasajeros Gaspar zozobró minutos después de zarpar desde isla Perico, en la bahía de Panamá. Veinte personas including un bebé de un año salvaron la vida gracias a la rápida acción de pescadores y unidades aeronavales, pero dos ocupantes murieron y otro continúa desaparecido.
Según la agencia EFE, el Servicio Nacional Aeronaval (Senan) movilizó helicópteros con grúa y patrulleras de alta velocidad tras recibir la llamada de auxilio poco antes de las 2:00 p. m. . El teniente Eliecer Castillo, jefe de Búsqueda y Rescate, confirmó que todos los pasajeros llevaban chalecos salvavidas, lo que facilitó las labores de extracción en mar picado. Aun así, varios sobrevivientes fueron trasladados a hospitales de la capital con deshidratación y signos de desorientación.
El presidente José Raúl Mulino lamentó la tragedia y ordenó “una investigación a fondo” para esclarecer por qué la embarcación comenzó a hacer agua en cuestión de minutos. El mandatario también instruyó a la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) a revisar el historial de mantenimiento del Gaspar y la vigencia de sus permisos de zarpe.
Aunque las causas oficiales se conocerán tras la indagatoria de la AMP, fuentes navales señalan que la lancha pudo haber sido sorprendida por un fuerte oleaje que no figuraba en los partes meteorológicos de la mañana. El archipiélago famoso por sus playas turquesas y tours de pesca acumula varios incidentes menores en la última década, sobre todo durante feriados, cuando el flujo turístico se dispara.
El propio Senan viene advirtiendo desde 2023 sobre el aumento de travesías no autorizadas y sobrecargadas. Su resumen operacional, actualizado al 31 de marzo de 2025, da cuenta de 184 misiones de búsqueda y rescate este año, con 516 personas salvadas; casi el doble del mismo periodo en 2024.
Mientras continúan las labores para localizar al desaparecido, autoridades recomiendan a los capitanes verificar con la Marina Mercante las condiciones de zarpe y a los pasajeros exigir chaleco y lista oficial antes de abordar. La temporada de Semana Santa, con mareas cambiantes y alto tránsito náutico, suele poner a prueba la seguridad marítima panameña.
En los próximos días, los resultados de la investigación dirán si se trató de una falla estructural, error humano o una combinación de factores. Lo cierto es que el accidente vuelve a encender las alarmas sobre la necesidad de reforzar los controles en rutas turísticas y garantizar que el disfrute del mar no termine en tragedia.
