Tesla, contra la pared controversias y competencia frenan su aceleración

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La compañía de vehículos eléctricos fundada por Elon Musk atraviesa un momento delicado. Sus entregas del primer trimestre de 2025 quedaron muy por debajo de lo esperado, y las reacciones no se han hecho esperar. Mientras algunos inversores critican el manejo de la marca, analistas del mercado consideran que las polémicas políticas de Musk desgastan la reputación de Tesla y distraen al CEO de sus responsabilidades empresariales.

Según la BBC, en un reporte firmado por la periodista Lily Jamali, las ventas de Tesla durante estos tres meses apenas superaron las 337.000 unidades, el nivel mÔs bajo que la marca experimenta en tres años. Esa caída ha sido particularmente notable frente a fabricantes chinos como BYD, que han ganado cada vez mÔs terreno en el mercado global. Varios expertos, ademÔs, han señalado que la vinculación de Musk con la administración Trump y la iniciativa del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) han amplificado el impacto negativo sobre la percepción de la empresa.

Datos divulgados por la Agencia Internacional de Energía (AIE) apuntan a que la demanda de vehículos eléctricos a escala mundial sigue creciendo, impulsada por la expansión de infraestructuras de carga y nuevos modelos competitivos de firmas tradicionales y emergentes. Mientras esos números suben en mercados europeos y asiÔticos, la trayectoria de Tesla luce empañada por las protestas contra Musk y el boicot a sus concesionarios en varias ciudades. Inversionistas preocupados exigen un cambio de timón, y se habla de un posible reemplazo en la dirección si las cifras siguen a la baja.

La situación pone en entredicho la solidez de la marca, sobre todo ahora que compradores potenciales miran opciones distintas. Algunos consideran que los constantes pronunciamientos políticos de Musk contradicen la imagen de innovación y libertad que Tesla había sabido cultivar. Eso se traduce en incertidumbre, particularmente entre quienes invierten en vehículos eléctricos esperando no solo avances tecnológicos, sino también una postura corporativa mÔs neutral. Con el futuro de Tesla sujeto a tantas presiones, su comportamiento en el mercado de aquí a fin de año serÔ decisivo para calibrar si esta turbulencia es temporal o si la compañía se enfrenta a una crisis de mayor profundidad.

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