El anuncio de la Asociación Cibao de Ahorros y Préstamos de habilitar Apple Pay marca un paso firme en la carrera por modernizar los pagos digitales en la República Dominicana. La entidad fundada en Santiago en 1962 y con más de un millón de clientes se convierte en la primera asociación de ahorros y préstamos del país en ofrecer esta billetera móvil, abriendo el camino para que sus tarjetahabientes paguen con un simple toque desde su iPhone o Apple Watch.
Aunque la movida es pionera dentro del universo de las asociaciones, no ocurre en un vacío desde mediados de 2024 bancos como Banreservas, Banco Popular Dominicano y BHD ya habían incorporado Apple Pay, apalancados en el visto bueno de Mastercard y la inclusión oficial del país en la lista de territorios compatibles de Apple.
El procedimiento para los clientes de la Asociación Cibao es idéntico al estándar global: abrir Wallet, pulsar “+”, digitalizar la tarjeta y comenzar a pagar al instante. Detrás hay varios candados de seguridad: Face ID o Touch ID para autenticar cada transacción y la tokenización que reemplaza el número real de la tarjeta por un código cifrado almacenado en el Secure Element del dispositivo. Estos protocolos dificultan el robo de datos y reducen el fraude presencial, un problema que en América Latina costó más de US $250 millones en 2023, según cifras de la firma Aite-Novarica.
“Seguimos apostando por tecnologías que faciliten la vida del usuario sin sacrificar la seguridad”, comentó Ninoska Suárez, vicepresidenta de Mercadeo de la Asociación, al presentar la novedad. Sus palabras resumen el atractivo principal: un viaje de pago más corto dentro y fuera de la web, sin contacto físico y con respaldo bancario local.
Más allá de la conveniencia, la integración presiona al resto del sistema financiero cooperativo y a las fintech emergentes a ponerse al día. Con un parque de smartphones donde el 26 % son iPhones datos de StatCounter para abril 2025 el segmento premium del mercado dominicano demanda experiencias de pago a la altura de destinos como Miami o Panamá. Si otras asociaciones tardan en adoptar billeteras digitales, podrían perder terreno frente a bancos comerciales ya alineados con Apple Pay y Google Wallet.
También hay implicaciones para los comercios los POS con NFC ganan relevancia, y el Ministerio de Industria y Comercio proyecta que el 80 % de los terminales activos deberán ser “contactless-ready” antes de 2027 para cumplir con las nuevas normas de interoperabilidad. Esto podría agilizar la formalización de micro-negocios que, hasta ahora, rechazaban pagos con tarjeta por miedo a robos de datos o altos costos de alquiler de terminales.
Finalmente, la entrada de Apple Pay en la Asociación Cibao refuerza la tendencia de alianzas público-privadas orientadas a la digitalización de la economía. Programas como “Billetera RD”, que subsidian la adopción de POS inalámbricos en colmados y mercados populares, recibirán un impulso adicional al disponer de más usuarios reales con billeteras móviles activas.
En síntesis, la decisión de la Asociación Cibao no solo ofrece otra opción de pago chic para sus clientes; también eleva la vara de competitividad en el sector y acelera la migración hacia un ecosistema financiero donde la seguridad y la practicidad van de la mano. El reto ahora es que esta innovación no se quede en zonas urbanas de alto ingreso, sino que permee todo el territorio nacional, democratizando el acceso a pagos digitales seguros y eficientes.