Arranca la etapa en la que muchos espaƱoles revisan sus cuentas para rendir cuentas al fisco. Desde esta semana, quienes obtuvieron ingresos durante el aƱo pasado podrĆ”n acceder a las herramientas en lĆnea para presentar su declaración del IRPF y descubrir si tienen saldo a favor o deben ingresar un importe adicional. Aunque varios contribuyentes estĆ”n exentos de declarar, nunca estĆ” de mĆ”s examinar el borrador para confirmar si, tras las retenciones y las deducciones correspondientes, puede surgir alguna devolución.
Tal como explica elpais, la declaración no es un requisito obligatorio para todo el mundo. Aquellos trabajadores que recibieron menos de 22.000 euros de un Ćŗnico pagador, por ejemplo, podrĆan quedarse al margen. Sin embargo, si existieron dos o mĆ”s empleadores y la suma del segundo āy los siguientesā supera los 1.500 euros, el lĆmite cambia a 15.876 euros. En lo que respecta a rentas de inversiones, dividendos y otros intereses, la obligación comienza a partir de 1.600 euros anuales. AdemĆ”s, hay beneficios exentos de presentación si no se supera un umbral de 1.000 euros en Ć”mbitos como las rentas inmobiliarias, subsidios de vivienda protegida y ayudas pĆŗblicas.
Para quienes se mueven en el rĆ©gimen de autónomos, el panorama es mĆ”s estricto. De acuerdo con datos oficiales de la Agencia Tributaria, la declaración resulta ineludible, sin importar la cantidad generada a lo largo del ejercicio. Lo mismo ocurre con las personas que perciben el Ingreso MĆnimo Vital, ya que el Gobierno espaƱol incluyó esta obligación para todos los integrantes de la unidad familiar o de convivencia que reciben dicha prestación.
Fuentes pĆŗblicas apuntan que presentar el IRPF trae varias ventajas para muchos perfiles. Aun si no se alcanza el mĆnimo exigido, no estĆ” de mĆ”s formalizar la declaración, sobre todo cuando existe la posibilidad de beneficiarse de deducciones o devoluciones. El Ministerio de Hacienda recalca que numerosas familias dejan de recibir ingresos adicionales justamente por no realizar el proceso. AdemĆ”s, a partir del 6 de mayo se habilitarĆ” atención telefónica con cita previa, y en junio habrĆ” asistencia presencial para quienes requieran orientación personalizada.
La campaña finaliza el 30 de junio, excepto para las declaraciones con resultado a ingresar que se domicilien, cuyo plazo culmina el 25 de junio. Conviene vigilar el calendario y no dejarlo todo para el último momento. Con un poco de organización, se pueden evitar aglomeraciones y gestionar con calma cualquier asunto pendiente. Un vistazo rÔpido al borrador puede revelar oportunidades de ahorro o la conveniencia de introducir modificaciones para mejorar el resultado. Si aún hay dudas, los asesores fiscales y la propia Agencia Tributaria ofrecen canales de ayuda para despejar cualquier incertidumbre.