Para quienes viven del otro lado del charco y los que cobran aquí mismo en pesos, el precio del dólar se ha vuelto tema obligado en el desayuno. No es simple curiosidad: de ese número dependen las remesas, los pagos de tarjetas y hasta el presupuesto del fin de semana.
Según el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), la referencia oficial de este viernes se mantiene en RD$ 58.65 para la compra y RD$ 58.95 para la venta. Es decir, el billete verde sigue cómodamente por encima de los 58, cincelando una ligera depreciación del peso frente al cierre promedio de 2024.
El euro también despierta interés: hoy se paga a RD$ 66.17 por unidad, consolidando la brecha histórica que lo coloca unos siete pesos por encima de su par estadounidense. Para quienes ahorran en moneda europea, el diferencial ofrece un colchón extra frente a variaciones repentinas.
Detrás de estos números late la realidad de las remesas. Solo en 2024 el país recibió US$ 10,756 millones, un récord que volvió a batirse durante el primer trimestre de 2025, con US$ 2,962.8 millones ingresados. Este flujo constante de dólares inyecta liquidez y amortigua presiones cambiarias, aun cuando la demanda de importadores aprieta.
En paralelo, la autoridad monetaria decidió mantener la tasa de política en 5.75 % anual, sosteniendo el sesgo expansivo con el que busca anclar la inflación actualmente en 3.6 % interanual sin estrangular el crédito. El mensaje es claro no habrá virajes bruscos mientras los precios se mantengan bajo control y el turismo llene hoteles durante la temporada alta.
Para el bolsillo cotidiano esto se traduce en lo siguiente:
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Envío de remesas. Conviene comparar plataformas: casas de cambio y bancos aplican sobreprecios de hasta RD$ 0.25 sobre la venta oficial en operaciones pequeñas.
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Pagos en línea. Tarjetas internacionales liquidan a la tasa del emisor más un cargo de hasta 2 %; verificar el “markup” evita sorpresas.
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Créditos en dólares. Quien tomó préstamos a 55 pesos por dólar en 2023 ya enfrenta un alza superior al 7 %. Refinanciar o prepagar puede ser sensato si se espera que el tipo de cambio roce 60 a finales de año, como pronostican algunas corredoras.
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Ahorro. Un depósito indexado al dólar sigue siendo el refugio predilecto; no obstante, instrumentos en pesos a tasa fija ganan atractivo si la inflación se queda bajo 4 %.
En resumen, el dólar amaneció tranquilo, pero la dinámica seguirá ligada al pulso de las remesas, el turismo y las decisiones de la Reserva Federal. Mantenerse informado y diversificar no solo en divisas sino en plazos y productos sigue siendo la mejor defensa para el ciudadano y la empresa dominicana.