El euro arrancó la jornada de este martes con una leve apreciación frente al peso criollo, una variación que, aunque discreta, vuelve a colocar la divisa europea en el centro de las decisiones de viajeros, importadores y ahorristas locales.
Según datos oficiales del Banco Central de la República Dominicana (BCRD) y los tableros de los principales bancos comerciales, la tasa de referencia para hoy se ubica en RD$ 67.42 la compra y RD$ 70.00 la venta, mientras que las entidades privadas negocian la moneda entre RD$ 65.50 y RD$ 71.00, con el Popular y el Banreservas marcando los extremos del rango.
En términos prácticos, quien necesite euros para un viaje a España pagará alrededor de RD$ 70 por cada unidad, apenas un peso por encima del promedio de la semana pasada. A lo interno del año, el euro se ha movido en una banda de RD$ 66-70; el promedio anual ronda RD$ 66.35, de acuerdo con estadísticas históricas de mercados cruzados.
Mirando fuera de la isla, el contexto es todavía más interesante el Banco Central Europeo fijó ayer el euro en US$ 1.1429, su mejor nivel frente al dólar desde abril, apoyado por señales de moderación inflacionaria en la eurozona. No obstante, en los mercados globales la fortaleza del billete verde se mantiene: las conversaciones comerciales Washington-Pekín y los datos de precios al consumidor que se publican mañana en EE. UU. mantienen al dólar al acecho, limitando mayor escalada del euro.
Para importadores de insumos europeos, esta estabilidad relativa es un respiro: aún no compensa el encarecimiento logístico, pero permite programar pagos con un margen de error acotado. En sentido contrario, las casas exportadoras que facturan en dólares seguirán viendo cómo cada euro ingresado rinde menos al convertirlo. La recomendación de los corredores cambiarios es clara fijar órdenes limit y evaluar coberturas a tres meses en caso de exposiciones superiores al 20 % del flujo.
Los viajeros, por su parte, deberían anticipar compras de efectivo si el euro perfora los RD$ 68 en ventanilla un umbral que históricamente dura poco y aprovechar tarjetas multi-divisa para gastos menores. Los expertos coinciden en que, salvo un giro brusco en la política monetaria dominicana o un repunte inflacionario en la zona euro, la paridad peso-euro permanecerá cercana a la banda actual durante el verano boreal.
En resumen: la cotización de hoy no es noticia de portada, pero sí un recordatorio de que incluso fluctuaciones mínimas pueden marcar la diferencia en presupuestos ajustados. Mantenerse al tanto de las tasas oficiales y mover fichas con disciplina sigue siendo la jugada ganadora en el tablero cambiario dominicano.
