La Dirección General de Migración (DGM) efectuó ayer un vasto operativo de interdicción que culminó con la detención de 1,442 ciudadanos haitianos sin documentos, además de la repatriación inmediata de 892 de ellos a través de los pasos fronterizos de Dajabón, Elías Piña, Jimaní y Pedernales.
Según reseñó el portal deultimominuto, los agentes desplegaron patrullas mixtas en el Gran Santo Domingo, la región Norte y el Este, así como en corredores rurales donde suele concentrarse mano de obra haitiana. El informe oficial detalla que solo en la capital fueron interceptadas 144 personas, 78 de ellas en las inmediaciones de centros hospitalarios.
La jornada forma parte del plan de “control territorial” que el Gobierno puso en marcha en octubre pasado. Desde entonces, la DGM asegura haber devuelto a más de 180 mil haitianos, una cifra confirmada en abril por estadísticas internas divulgadas.Fuentes militares añaden que, si se suman las detenciones del Ejército, Policía Nacional y CESFRONT, el flujo expulsado entre enero de 2024 y abril de 2025 supera los 209 mil casos.
Las autoridades insisten en que cada traslado “cumple los protocolos internacionales” y se realiza “con pleno respeto a los derechos humanos”. Sin embargo, organizaciones como Amnistía Internacional cuestionan el procedimiento. En un informe presentado ante el Comité de Derechos Humanos de la ONU en marzo, la ONG denunció perfilamiento racial, redadas cerca de hospitales y expulsiones de mujeres embarazadas y menores de edad.
Radiografía de un operativo
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Geografía de las detenciones. La mayor captura se registró en la Zona Este (342), seguida del Gran Santo Domingo y Santiago. En la Línea Noroeste, donde la economía agrícola depende casi por completo de mano de obra haitiana, la DGM apresó 82 personas entre Mao y Santiago Rodríguez.
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Participación militar. A la par de los inspectores migratorios, el Ejército reportó 530 detenciones, mientras que CESFRONT sumó 67 en puntos próximos al vallado fronterizo.
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Centros de retención. Los extranjeros indocumentados pasan por los centros de Haina y Santiago antes de ser conducidos en camiones al cordón limítrofe. La DGM afirma que la estadía promedio es de 48 horas, aunque activistas refieren casos de hasta cinco días sin audiencia ni abogado.
¿Qué cambia a partir de ahora?
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Cuotas semanales. El Palacio Nacional mantiene la meta pública de deportar “hasta 10 mil haitianos cada siete días”. No obstante, cifras oficiales indican un promedio real inferior a 4 mil, lo que presiona a Migración a intensificar batidas en zonas urbanas.
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Construcción del muro. Con un avance de 55 %, el primer tramo del “muro inteligente” en Dajabón promete reforzar el control y reducir los costos de patrullaje terrestre, según el Ministerio de Defensa.
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Tensión diplomática. Puerto Príncipe carece de capacidad consular para procesar cientos de retornos diarios, lo que deja a muchos deportados a su suerte en el lado haitiano, agudizando la crisis humanitaria.
Entre la seguridad y la crítica
Sectores empresariales del agro respaldan la estrategia oficial y alegan que el flujo irregular distorsiona el mercado laboral local. Del otro lado, colectivos de derechos humanos acusan al gobierno de usar la migración como cortina de humo en año pre-electoral. “La narrativa de la amenaza externa cala en parte de la población y resta atención a problemas internos como la inflación”, advierte la politóloga Raquel Encarnación.
Mientras la discusión se caldea, los números siguen creciendo: solo en el primer trimestre de 2025 se registraron 86,406 deportaciones formales, según datos de la propia DGM recogidos por medios nacionales. Con la maquinaria migratoria en modo acelerado y un Haití sumido en violencia y vacío de poder, todo apunta a que el tema migratorio seguirá en primera plana y, de paso, en la agenda electoral dominicana.
