Kananaskis, Canadá. En pleno arranque de la cumbre del G7, el presidente estadounidense Donald Trump endureció su discurso migratorio y prometió “redadas más intensas y profundas” en las grandes urbes gobernadas por demócratas, calificando la medida como respuesta necesaria al “poder electoral” que según él otorgan los indocumentados a la oposición. La advertencia eclipsó la agenda oficial sobre seguridad energética y cambio climático que anfitriona el primer ministro Mark Carney.
De acuerdo con la agencia EFE, Trump puntualizó que la ofensiva se centrará en las denominadas ciudades santuario Los Ángeles, Chicago y Nueva York, entre otras porque “ahí es donde reside la gente que queremos deportar”, sostuvo al comparecer junto a Carney.
El anuncio se fraguó horas antes, en un extenso mensaje publicado en Truth Social, donde el mandatario acusó a los “demócratas de izquierda radical” de “usar a los ilegales” para ampliar programas sociales y “falsear elecciones”; también instruyó a su gabinete a destinar “todos los recursos posibles” para la operación que bautizó como Mass Destruction Migration.
Las llamadas ciudades santuario limitan la colaboración de la policía local con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Esa política, respaldan defensores de derechos civiles, reduce el subregistro de delitos y fomenta la denuncia entre inmigrantes; para la Casa Blanca, en cambio, constituye “protección deliberada a la ilegalidad”.
No obstante, la embestida choca con cálculos económicos casi la mitad de los 850 000 trabajadores agrícolas del país carecen de papeles, advierte el propio Departamento de Agricultura; sectores como hotelería y restauración exhiben dependencias similares, lo que encendió alarmas sobre posibles desabastecimientos y alzas de precios si se concreta la purga.
La tensión ya se palpa en California. Tras las primeras redadas en Los Ángeles, Trump envió 4 000 efectivos de la Guardia Nacional y 700 marines, decisión que un juez bloqueó provisionalmente al señalar “federalización intempestiva” de tropas estatales. El litigio se suma a divisiones internas el Departamento de Agricultura solicitó una pausa en operativos en granjas y hoteles, mientras asesores de línea dura presionan por continuar.
El mandatario también describió a Chicago como una ciudad “invadida por criminales”, pero los números de la propia policía desmienten ese retrato en febrero hubo 20 homicidios, 31 % menos que el año anterior y el nivel más bajo desde 2019; abril registró la cifra mensual de asesinatos más baja en una década, con un descenso interanual del 15 %.
Fuentes diplomáticas afirman que el tema migratorio amenaza con opacar la cumbre varios líderes temen que la retórica de Trump desvíe los reflectores de la agenda sobre incendios forestales que Canadá impulsó tras una de las peores temporadas de fuegos de su historia reciente.
Al cierre de esta edición, los equipos legales del gobierno buscaban blindar la operación migratoria antes de que nuevas cortes entren a considerar su constitucionalidad. Mientras, alcaldes y gobernadores demócratas preparan recursos para frenar los arrestos masivos y contener la posible desaceleración que, paradójicamente, podría golpear primero a las economías locales que la Casa Blanca asegura querer “rescatar”.