En el Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea celebrado ayer martes en Bruselas, el titular del Departamento español, Luis Planas, solicitó medidas europeas concretas de apoyo para los sectores agroalimentarios más afectados por los aranceles recientemente impuestos por la administración estadounidense.
De este modo, a petición de España y de Francia, El Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca de la UE debatió, sobre el impacto de los aranceles de Estados Unidos —en el marco del litigio por el caso del consorcio Airbus— sobre el sector agroalimentario, una reivindicación que apoyaron ocho países más. Los aranceles afectan a productos como el aceite de oliva envasado y la aceituna de mesa verde, el vino y los licores, las frutas y hortalizas en conserva, los cítricos, la carne de porcino y los quesos.
Medidas europeas frente a los aranceles
En este sentido, Luis Planas aseguraba que “es urgente disponer de apoyos adicionales para los sectores más afectados, agricultores e industria. La situación puede agravarse, ante el anuncio por parte de EEUU de la revisión de la lista de productos y la cuantía de los aranceles impuestos en el marco de la disputa por el caso Airbus. La Política Agrícola Común (PAC) dispone de instrumentos que tenemos ya y que se pueden poner en marcha para estabilizar precios y mercados de un producto”, y subrayaba la necesidad de que se aplique el almacenamiento privado de aceite de oliva de manera eficaz.
Por otro lado, dentro del debate sobre la reforma de la PAC, el ministro señalaba que “la futura PAC post 2021 debe tener herramientas para dar respuestas a problemas como este y, en general, a la cada vez mayor volatilidad de los mercados”, y pedía que de cara a la reforma se revisen los precios de referencia de desencadenamiento del almacenamiento privado de aceite de oliva.
En esta misma línea, el Consejo examinó también los avances en las negociaciones sobre la futura Política Agrícola Común (PAC) que se han producido en el último semestre, que según el ministro español recogen buena parte de las mejoras propuestas por España en relación a las propuestas originales de la Comisión Europea. Entre esos progresos figuran la posibilidad de conceder ayudas bajo eco-esquemas por cabeza de ganado, fijar pagos redistributivos con diferentes importes por regiones.